miércoles, 30 de julio de 2008

hágase tu voluntad


Navego mares rojos, la memoria
nos busca en los entresijos
del alma.
Cadencia de besos, el vaivén
de las olas nos lleva
en alas del viento
al tiempo regresado.
Se abre el cielo a nuestro paso
iluminando los recodos
del miedo, nos augura
el tiempo de sombras vencidas,
el hálito del beso que nos une.