El Partido de los Trabajadores,
llamado antes “Partido Popular”,
ha encontrado su imagen ejemplar
en la insigne y leal María Dolores.
El sueldo de treinta y tantos obreros
se embolsa cada año esta señora,
“obrera” por más señas. Aún implora
igualdad para todos, ¡qué sinceros
son estos populares, qué grandeza
subsistir con cuarenta milloncejos
y mantener un tipo tan lozano!
¡Qué pobre, Cospedal!, ¡Cuánta entereza
para lucir sin pena trapos viejos
a la espera del triunfo de Mariano!