jueves, 4 de septiembre de 2008

diossss....¡qué torpes!


Para deducir que la educación les importa un pimiento a los políticos no hace falta ir a Salamanca. Tampoco creo que, salvo los Ministerios de Economía e Interior, los demás sean "monsergas, monsergas y monsergas", como ha dicho el otro.
Pero de eso a regalar títulos de FP a diestro y siniestro, hay un abismo. Sí, ya sé que no es un regalo, que las condiciones son: haber trabajado tres años y pasar una prueba práctica. Muy bien, así los fontaneros, cocineros, electricistas,... que llevan años ejerciendo su profesión, y no tienen un título, tendrán más posibilidades en el mercado de trabajo. Muy bien.
Y ahora, tomamos a uno de estos trabajadores "experimentados", les ponemos una prueba, como construir una pared, arreglar un grifo o una caldera, y les damos el título. Al día siguiente, tenemos a nuestro "trabajador titulado" ante una instalación innovadora, con nuevos equipos, con nuevos componentes...Y nuestro amigo, que no sabe interpretar un plano, que no comprende un escrito, que no sabe redactar unas instrucciones..., nos hace un apaño de los de "tentemientrascobro".
¿Que no queda tan bien la pared pintada?...No pasa nada. ¿Que al coche le cuesta arrancar por el frío?... No pasa nada. ¿Que el agua de la ducha no sale con mucha presión?...No pasa nada. Ahora bien, ¿Quién subiría a un avión reparado por nuestro amigo?, ¿Quién se fiaría del nuevo diferencial?, ¿Quién le dejaría su coche para una revisión de frenos?, ¿Quien se prestaría a una sesión de radioterapia?