sábado, 22 de septiembre de 2012

El camellito sabio

“Se escribe por necesidad”, decía Ángel González.
Por necesidad os traigo hoy el cuento de “El camellito sabio”. Más que nada para evidenciar el error en que se encuentran “los amos del zoo”, sobrados ellos de suficiencia al punto de no permitir que nadie les distraiga en su afán de dejar las cosas como están (“Virgencita, virgencita…”), o el ya manido “Siempre se ha hecho así”. Como si fueran argumentos no ya para pifiar (“Errare humanum est”), sino para permanecer en el error por los siglos. Con la que está cayendo, más les valdría abrir los ojos y cerciorarse de que cada vez somos más los que nos llevamos las manos a la cabeza por sus acciones u omisiones que no hacen sino prolongar unos modos decimonónicos, sea ya en la política, en la educación o en el quehacer diario donde no caben sus patéticas ocurrencias, sus convicciones sin argumentos donde sustentarse y la absurda creencia de sentirse imprescindibles (“Los cementerios están llenos de imprescindibles”).

Es necesario, pues, un barrido sin miramientos para que estos “amos del zoo o de la finca” por fin levanten las posaderas de sus regios tronos, donde en palabras de Machado se limitan a “despreciar cuanto ignoran”- traducido, “la ignorancia es atrevida”-, y den paso a mentes preclaras y culos inquietos que más ayudarían a darle una mano de verdad al paisaje, y falta que le hace.

Políticos, sindicalistas, amos de pequeñas fincas públicas en general: hagan el santo favor de levantar sus posaderas y tomar un sorbo de aire fresco. Su salud se lo agradecerá. Y más aún, se lo agradecerá la salud de tantos y tantos “camellitos” con más talento, más conocimientos, más capacidad y, sobre todo, más entusiasmo.

El camellito sabio

Una madre y un bebé camello estaban descansando, y de repente el bebé camello pregunta....
Bebé: Madre, ¿puedo preguntarte algunas cosas?

Mamá: ¡Claro que sí ! ¿Por qué hijo, hay algo que te molesta ?

Bebé: ¿Por qué los camellos tenemos joroba?
Mamá: Mira hijo, nosotros somos animales del desierto, y necesitamos la joroba para guardar agua y podamos sobrevivir sin ella.

Bebé: ¿Bien, entonces por qué son nuestras piernas largas y nuestros patas redondas?
Madre: ¡Hijo, obviamente ellos se adaptan para andar en el desierto, con estas piernas nos podemos mover por el desierto mejor que nadie ! Dijo la madre orgullosamente.

Bebé: ¿Bien, entonces por qué son nuestras pestañas tan grandes? A veces esto molesta mi vista.
Madre: Hijo mío, aquellas pestañas largas y gruesas son su tapa protectora. Ellos ayudan a proteger tus ojos de la arena de desierto y viento, dijo su madre con ojos llenos de orgullo....

Bebé: Ya entiendo. Entonces la joroba debe almacenar el agua cuando estamos en el desierto, las piernas son para andar por el desierto y estas pestañas protegen mis ojos del desierto...
Entonces ¿qué demonios estamos haciendo aquí en el zoológico ?????

MORALEJA:

Habilidades, conocimiento, capacidades y experiencia sólo son útiles si estás en el lugar correcto...

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